Una corriente de aire fresco entraba en una nación en decadencia y con un fuerte sabor a rancio.
Sin embargo los poderes facticos de siempre no iban a permitir que se les privasen de sus privilegios, tras siglos en el poder, con opresión, hambre y miseria de la gran mayoría de la Nación Española.
"Al país: Las elecciones celebradas el domingo (1 2 de abril) me revelan claramente que no tengo el amor de mi pueblo…
Manifiesto de despedida de Alfonso XIII (13 de abril de 1931).
No hay comentarios:
Publicar un comentario